Hablando de... Alma Salvaje
Hay un grupo de actores y actrices de los que es escuchar su nombre como parte de algún proyecto cinematográfico y sentir curiosidad por ver cómo han trabajado ese personaje, cómo se han metido en la piel de esa persona, real o ficticia, a la que han aceptado interpretar.
Uno de esos nombres es Reese Witherspoon.
Cuando vi que no sólo interpretaba, que también tomaba partido como productora en este proyecto, mi interés por ver esta cinta creció.
Debo admitir, que había intentado verla antes y en ese momento, me resultó difícil, por lo que me di cuenta de que mi estado de ánimo no era el adecuado para este film así que lo postergué.
E hice bien, tomé una gran decisión porque esta es una gran película que me habría perdido por errar en una valoración debido a mi estado anímico (cansancio, volumen de trabajo, horas de sueño...) y no como merecía.
Si vais a ver esta película, que por si no os habéis dado cuenta aun recomiendo completamente, voy a haceros dos recomendaciones:
Tened una bebida siempre cerca.
Tened kleenex a mano.
Esta cinta nos explica la historia de una chica, convertida en mujer y cómo sus decisiones presentes y pasadas la han llevado a donde está hoy, en una búsqueda por conocerse, por encontrar su lugar.
Como espectadora me he sentido muy identificada con ella, sus sentimientos, su mundo y he sufrido, llorado, me he enfadado y reído.
Este es un film que despierta muchas emociones y culmina de una forma magistral.
Encuentro que combina muy bien los distintos planos para crear el efecto deseado, la música está muy bien ligada con la historia y las localizaciones que nos muestra son espectaculares.
Reese está sublime en su interpretación.
Sin dudar me quedo con esa frase final.
Así que...
Seamos salvajes.
Nota:
Tras ver la película, muy poco tiempo después, debo añadir, me enteré de que este film está basado en un libro por lo que aun tiene más mérito lo que se logra transmitir en ella.
Recomiendo, como siempre, leer el libro antes de ver la película pero si os ocurre como a mí en este caso, no tiene nada de malo hacerlo al revés.
No dejéis de leer el libro por haber visto ya la película pues en las adaptaciones hay partes del libro que se diluyen.
