Hablando de...Series. Pequeñas Mentirosas
… Sí, he empezado este artículo "Hablando de…" con puntos suspensivos (y lo volvería a hacer);
hoy os presento (para aquellos que no la conozcáis) la serie:
Pretty Little Liars, cuyo título en su traducción al español es:
Pequeñas Mentirosas.
Lisa, esto parece muy serio para ser uno de tus artículos.
Sí, estoy muy seria (lo digo de verdad).
Empecé a ver esta serie (he visto completas tres temporadas) movida por la admiración que le tengo a Holly Marie Combs (actriz que conocí en Embrujadas).
En esta serie sigue demostrando su calidad y profesionalidad (las cosas como son).
Lo siguiente que me llamó la atención para ver esta serie dirigida a un público adolescente fue el hecho de enterarme que se basaba en una serie de novelas de Sara Shepard, 16 libros conforman la Saga y 2 más son complementarios (no, lo siento, no los he leído pero sabemos que suele ser un buen síntoma).
Así pues, con toda mi ilusión, me dispuse cual friki a ver esta serie (¿qué podía fallar?).
Tengo que aplaudir el trabajo que han hecho todos los involucrados en la serie, incluidos los actores.
Crean un universo alrededor de la historia verosímil y creíble (incluso en momentos en que piensas: Qué absurdo lo que acaba de hacer), tanto que odio (sí, sí lo he dicho y lo repito: odio) a las protagonistas.
Han hecho tan bien su papel de adolescente inconsciente que se cree que sabe qué es lo mejor en cada momento, que las he llegado a odiar (entiéndase esto como un piropo).
Estoy enganchada a la serie nada más que para ver si las mata el malvado A (A es el malo malísimo de esta serie que no deja de amenazar a todo Cristo en movimiento y hace de las suyas aquí y allá pero las protas ahí siguen).
Que yo pensaba ayer: si llega el fin del mundo sobrevivirán las cucarachas y estas cuatro niñas (que no hay forma oye).
Por primera vez en años, me siento identificada con el malo, pero no como personaje si no como una forma de muerte de la estupidez supina.
La serie en sí está muy bien construida y las tramas bien ligadas y, bajo mi punto de vista, lanza unas críticas brutales hacia la cantidad de mentiras aceptables y aceptadas de la sociedad actual y la educación de los hijos (aquí hay para todos los tipos de padres: consentidores, pasotas, ausentes, preocupados, sargentos, metomentodos…); para que entendáis un poco mejor lo que quiero decir:
Es un manual de todo lo que no hay que hacer en ningún aspecto de tu vida, ni en el trabajo, ni en tu casa, ni con tus hijos, ni en tus relaciones de pareja…
Eso sí, es la mejor y más efectiva reivindicación contra el bulling, el nepotismo, el acoso y el mobbing que he visto nunca (¿cómo os quedáis?).
Que yo sepa se está emitiendo actualmente la sexta temporada en Estados Unidos y se ha firmado por una séptima, avisados quedáis.
Si queréis ver despertar un instinto irracional y homicida, vedla, si no, mejor no empecéis o no podréis parar hasta saber si al final consiguen cargarse a las cuatro protagonistas.
